Ya ha pasado San Valentín y, sin embargo, yo aún sigo viendo por la calle a chicas más felices que la protagonista de una comedia romántica en pleno desenlace de la misma. Y, por si dicha (y dichosa) felicidad pretenciosa no fuese suficiente para mi amplio campo visual, todas y cada una de estas alegres mujercitas llevaban consigo un ramo de flores.
Es un hecho: San Valentín ha pasado a ser una fiesta por partida doble. Ya no se conforman con el 14 de Febrero, Cupido ha decidido hacer de las suyas en pleno 15 de Febrero.
Pero bueno, yo no escribía para criticar a ángeles caídos ni a las relaciones amorosas de las parejas de hoy en día. Yo escribía para recordar a todas aquellas personas que han sido devastados alguna vez por un "ser querido" y que han decidido tomar venganza en pleno día de San Valentín.
Si queréis un buen asesor, llamad a Tom: es un artista. Para ver a qué se dedica no os perdáis esta escena de una de mis películas favoritas: (500) Días Juntos.
Que la disfrutéis.
Es una peli que me recomendaron por internet, tengo cierto reparo a la hora de ver comedias románticas digamos modernas (para mí moderno es todo lo posterior a 1970 :P), pero tengo que reconocer que ésta me gustó mucho, y los textos que hace el protagonista para los textos de las tarjetas de felicitación, son un puntazo :-)
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